El día 26, una vez más acudí al homenaje a Mariana Pineda, pecador irreductible han sido muchos los años acompañándola, aún en aquellos tiempos en los que el 26 de mayo o el día de los difuntos pedías permiso en la Catedral para bajar a la cripta, ocasión en la que de modo infalible te miraban con cierto recelo y te decían "¿qué? ¿otro año por aquí?.
De aquellas ocasiones conservo algunas fotos, existía el color pero el blanco y negro te daba más discreción al hacer las copias. Una de ellas la acompaño.
Vuelvo al 2022, un año más y esta vez no soy yo el Ayuntamiento ha dado un cutre espectáculo el día de Mariana eso sí con la bendición del Sr. Vigueras, si hay algún modo de lograr que algo no funcione es repetir aquello que te llevó al fracaso los últimos diez años, pues siguen en lo mismo. ¿Cuesta tanto pensar distinto? ¿Educar en ciudadanía? ¿participación infantil? ¿participación de otras entidades además de los del taxi?
Algún día lograremos sea la fiesta de la Libertad, de la Ciudadanía, una fiesta que no necesite competir u ocultar las fiestas locales tradicionales.
Junto a la vieja imagen de los años 70 os traigo algunas de la celebración de 1931. no tienen nada que ver con el pobre espectáculo del jueves,
Y para acabar un secreto, mejor un indicio que eso es lo que tiene hurgar en los papeles, hace poco alguien presentaba un libro sobre un personaje al que he dedicado muchas horas, la Zapatera, la portada era elocuente pero me chirriaba, Agustina en una manifestación, se me había escapado. No pongo la imagen ni del libro ni de la foto original pero si pondré el pie de foto en 1931:
"... la cabeza de la manifestación, formada por las señoras que ejercen cargos administrativos, dirigiéndose al monumento..."
Un nuevo error que añadir a tan "curiosa" obra.